<body><script type="text/javascript"> function setAttributeOnload(object, attribute, val) { if(window.addEventListener) { window.addEventListener('load', function(){ object[attribute] = val; }, false); } else { window.attachEvent('onload', function(){ object[attribute] = val; }); } } </script> <div id="navbar-iframe-container"></div> <script type="text/javascript" src="https://apis.google.com/js/platform.js"></script> <script type="text/javascript"> gapi.load("gapi.iframes:gapi.iframes.style.bubble", function() { if (gapi.iframes && gapi.iframes.getContext) { gapi.iframes.getContext().openChild({ url: 'https://www.blogger.com/navbar.g?targetBlogID\x3d10280387\x26blogName\x3dEl+mundo+de+Maus!\x26publishMode\x3dPUBLISH_MODE_BLOGSPOT\x26navbarType\x3dBLACK\x26layoutType\x3dCLASSIC\x26searchRoot\x3dhttps://mausetchat.blogspot.com/search\x26blogLocale\x3den_US\x26v\x3d2\x26homepageUrl\x3dhttp://mausetchat.blogspot.com/\x26vt\x3d-3619001857709102129', where: document.getElementById("navbar-iframe-container"), id: "navbar-iframe" }); } }); </script>
El mundo de Maus!
 

Through Heaven's Eyes - Bryan Stokes Mitchell

Soy una masa mesomórfica de energía que pretende realizar los actos a su gusto. Simplemente yo me encargo de construir barreras para impedir su paso. No hay otra forma de explicarlo. Siempre tengo este impulso, esta aprensión.

Hoy fue un día “triste”. Después de 7 meses de sentirme en tensión, de estar siempre alerta, de sonreír, de aguantar y de calmar a los demás, me puse a llorar. Me escribió una amiga, y lo único que pude hacer fue ir a desahogarme. Y no ponerme a llorar por lo sucedido actualmente, sino por lo que me pasó hace meses. Llorar, porque ahora puedo hacerlo, porque ahora puedo desahogar lo que traje cargado tanto tiempo. Llorar por muchas cosas que igual y no tienen sentido. Pero es como después de un tiempo de larga tensión (en la que si acaso llegaras a llorar, lloras lo justo), puedes por fin liberarte y sacar todo de adentro.

Hoy Paty, así se llama, me vio llorar y llorar y llorar. Y aguantar la respiración para decirle lo que estaba pensando y después dejar las lágrimas correr. Porque no tiene sentido que alguien te vea, o te escuche llorar sin saber lo que está pasando. Quieren saber qué pasa.

Y ayer no estuvo “tan bien” tampoco. Tuve un momento de: “Ok, la estoy cagando muy cabrón, necesito hablar con alguien”. Y no encontré a nadie en ese momento lo cual me hizo sentir culerísimo. Ya después llegó Olga y me calmé, pero en el instante fue sentir un: primero “no mames que puto solo me siento”, y por otro lado “¿qué demonios me pasa? ¿dónde chingados quedó el Maus que yo conocía? ¡Este no soy yo! (y esto Pau me lo dijo hace tiempo)”

Si les cuento esto, no es para que desesperados se atrabanquen al teléfono y me busquen, es que a alguien necesito contárselo sin que se sientan mal. ¿o es que me debo tragar todo esto? No lo entiendo. Insisto: creo que perdí unos años de madurez y no sé cómo actuar en el mundo presente. He tenido que estar en pláticas donde me explican porque algo está mal y porque algo NO está mal. Y si no me lo explican sólo creo lo que yo veo: que la gente SIEMPRE es buena. Que si hago esto o lo otro lo sabrán interpretar. Pues no es verdad.

En fin, mientras lloraba con Paty le decía que tenía miedo, porque todo mundo se iba, y el único amigo que tenía me le había aferrado como pulpo al espinazo y no lo quería soltar. Le escribía desesperadamente. Y luego me arrepentía al darme cuenta que estaba exagerando; y me sentía peor que mal. Por que sentía que lo estaba asfixiando. Y en ese momento me habló Juan –un novio de una amiga francesa.-. Y son de esas cosas que dices: Eso no fue coincidencia, pero no es justo. Porqué cada vez que voy al doctor y algo me duele, cuando llego no me duele nada. Y ahora que digo que estoy solo, me hablan por teléfono. Ps, en fin, salí con ellos y todo está increíble. Me apapacharon y me dijeron que todo iba a estar bien, que necesitaban igual amigos, y que estaban ahí.

Es sólo saber que debo tranquilizarme. Que debo estar mes y medio esperando a que se acabe el máster y luego empezar las prácticas y tratar de encontrar gente con la que me pueda llevar. Es tener la paciencia que nunca he tenido, y tratar de soportar toda la energía que lucha por realizar acciones con tal de ver una reacción en la gente.

Y es raro. Por ejemplo: hace unos años, cuando estaba en EEUU y tenía 3 gatos y una gata. La gata para que no se la cogieran los gatos tragaba comida desesperadamente y luego se iba. Así estoy yo ahora, sin que nadie me vea, me trago desesperadamente lo que dejan en los platos semivacíos, o en los sartenes sin limpiar, tan rápido para que nadie alcance a verme. Porque el súper que hice para quince días duró una semana porque todo mundo usa lo de todo mundo. Y no me queda más que comer cada vez que puedo. Y no me siento mal. Porque sé que no me voy a morir. Sé que a final de cuentas, David y Sergio van a ir al Pico y van a pedir una botella y voy a poder comer las tapas. O César va a hacer de comer de más y me va a dejar para mí un montón. O Paty me va a dar unas cervezas (equivalentes a comida). No me siento solo en ese punto, sé que no me voy a morir de hambre, sé que una vez al día voy a comer algo.

Pero muchas veces quiero un abrazo. Sólo alguien que me vea y diga. ¡qué gusto! Aquí la gente no da abrazos, a menos que estés bajo algún efecto extraño de algo.

Y no estoy al borde del suicidio sino de “¡qué putas debo hacer pa’ ir por buen camino!”. Porque Madrid me pegó duro en la seguridad, después de pasar lo de mi papá, y otras ene mil cosas, pensaba que Madrid iba a ser la cosa más sencilla, pero ps no fue tan así. Y me doy cuenta que las personas que aquí me conocen no saben quien realmente soy… pero están descubriendo como quien seré. Es algo muy raro. Pero al menos sé en qué trabajar: seguridad y paciencia.

Siento que Madrid me está enseñando a ser paciente. A tranquilizar todo ese efecto TEC, de estar en dos presidencias, más un grupo estudiantil, una actividad extra-académica, teatro, musical, 2 materias profesionales, 2 de maestría y 2 de producción. Aquí tengo que aprender a esperar. A no hacer nada. A pensar en mí y sentirme bien. Aunque me esté picando los ojos. A calmar esa hiperactividad. A no tener que tener mi grupo de gente. Sólo estar yo, y si alguien está disponible aprovechar. PFFF qué difícil!

Pero al menos ahora ya veo el camino recorrido y se ve una subidota ENORME ya pasada, ya lo hice. Y lo que sigue, a final de cuentas ni se logra ver. Porque no sé cuánto tiempo más me queda aquí, pero sé que seré el último en irme. Y sé que tengo a gente que algún día, si no la cago, podré sentir “amigo” y lo que es más importante, ellos sentirán lo mismo. Y tengo que ser paciente. Sólo “madurar” o “rehacerme” y esperar que algún amigo siga ahí.

Pd. Es tan cagado. Parezco manual de culture shock. Me estoy dando cuenta que es lo que me está pasando y por lo que estoy pasando, y que las decisiones que estoy tomando van acorde al libro de “How to get over culture shock for dummies?” (no existe tal libro). Pero al vivirlo en propia piel es como WOW… esto está más perro de lo que recuerdo haber vivido en las últimas 7 veces que me mudé. Es un grado de consciencia muy extraño.

There

  1. Anonymous Anonymous | 11:36 AM |  

    Hola Mausie,
    Pues sí, tienes todos los síntomas de un gran choque cultural. Conozco algunos de ellos jajaja. A mí me tomó más o menos 5 años para acostumbrarme a México y otros 5 para pensar que quizás mi vida estaba ahí. Hoy en día todavía hay cosas que detesto de México (eso que la gente de abrazos a mí me molestaba mucho, por supuesto ya no) y nunca estoy segura de estar en el lugar correcto. En fin, yo pienso que es normal mientras recuerdes que siempre tienes de la opción de decir: pues sí estuvo chido pero eso no es lo que quiero. Y luego te mueves y nunca es fácil pero al menos eres dueño de tus decisiones.
    Ve y renta : What the bleep ....
    Te kero

  2. Anonymous Anonymous | 12:25 PM |  

    hola... te extraño mucho... dime a qué hora te conectas y podemos hablar largo y tendido, mándame un correito, va????

    y claro que puedes usar al 'monstruo del hubiera', considéralo un pequeño regalo a distancia...

    Un beso

  3. Anonymous Anonymous | 11:27 AM |  

    Hola hermano, eso de los choques culturales, me ha pasado varias veces, aunque de cualquier forma uno e acostumbra a ellos siempre es bueno voltear y ver si lo que haces te convence y te ahce feliz, a veces es bueno darse tiempo y platicar, a veces es bueno llorar... Cualquier cosa que necesites solo avisame pa platicar, aqui me tienes para lo que necesites...